Hace unas semanas, llegó una carta dirigida a la CD, enviada por el Comedor «El Gomero» invitando a los directivos y a todos los vecinos a colaborar con una olla popular en conmemoración de los 18 años del comedor. En esta oportunidad, hablamos con Carlos Durañona, voluntario y referente máximo del comedor, quien nos contó sobre los comienzos y cómo hoy en día ayudan a las personas que más lo necesitan.
El 26 de junio de 2002, en el Club Excursionistas, una asamblea barrial formó el Comedor de Barrancas para auxiliar a personas en situación de calle y cartoneros que se reunían en la estación de tren de Belgrano.
Carlos Durañona es uno de los fundadores del Comedor «El Gomero» y, a 18 años de su primera olla popular, recordó el comienzo de dicha iniciativa: «Esta idea comenzó tras la crisis de 2001. Nos juntamos los vecinos, nos pusimos a charlar y surgió la idea de hacer algo. Formamos una asamblea entre los vecinos y empezamos a reunirnos en el Club Atlético Excursionistas. Nuestro inicio estuvo ahí. En una de las reuniones finales que tuvimos decidimos crear el comedor y armar una olla popular en Barrancas de Belgrano para tener un gesto con la gente más necesitada».
También cuenta que, muchísimos años después, el espíritu del comedor continúa: «Nuestro comedor no tiene dirección, estamos en la calle para gente de la calle. Nosotros no los rechazamos. Los ayudamos en salud, alimentos, útiles, trámites y todo lo que haga falta». Y agrega que las reglas que se tienen dentro de «El Gomero» son claras: de política y religión no se habla.
En cuanto a los problemas que genera la cuarentena, asegura: «Por suerte la mayoría de los chicos ya cuenta con un teléfono al que nosotros le pagamos el crédito y nos podemos mantener en contacto. Estamos manteniendo el apoyo escolar para los docentes que tenemos».
Por último, Carlos le dejó un mensaje final a los vecinos de la Comuna 13: «La solidaridad es fundamental para poder subsistir. Todos necesitamos de todos».