Por Diego Houseman
Tengo 45 años y lloro como un nene, y ya no soy un nene, mi hija me mira y me dice papá estas bien? Si, Cata, si. Y que le voy a decir, que se me paralizó el corazón, que se me cayó el mundo, que estoy llorando a moco tendido porque se fue Diego, porque hoy no solo murió un tipo que jugaba bien a la pelota, hoy se murió el fútbol, hoy se murió mi infancia, y duele y como duele.
Hoy se murió mi Superman, su corazón dijo basta, su gran corazón dijo basta. Y mi corazón Te llora.
Hoy se fue quien todo lo podía, el que superaba adicciones o enfermedades como a rivales en un campo de juego, hoy se murió el que resucitaba de mil muertes. Y siento un vacío inexplicable.
Hoy vas a ver a Doña Tota y Don Diego, y verán llegar a Pelusa, te abrazarán y te mimarán de nuevo, te lo juro por Dalma y Gianina. Se murió Diego, el que se le paro de manos a Havelange o a toda la mafia de la FIFA, el que siempre puso el pecho por los jugadores por todos los jugadores.
Hoy mi barrilete cósmico se fue al cielo, ese mismo barrilete cósmico que les robó a los piratas y después nos regaló el mejor gol jamás soñado, en las mejores circunstancias y en el mejor momento.
Hoy se fue el que me enseño a hablar en italiano porque cada sábado canal 9 me traía tus goles napolitanos, y así aprendí a parlare, per il calcio e per te (por el futbol y por vos). E io piano ( y lloro).
Cuando tuve la suerte de ir a Italia con la cantidad de maravillas que tiene ese país solo quería conocer la casa de D10S, el Stadio San Paolo y cuando pude hacerlo, solo tenía imágenes tuyas en la cabeza, el penal a Zenga, el gol a Juventus, y miles de jugadas mágicas en ese césped. Y lloro.
Te pude conocer un miércoles 24 de junio de 1987, en un entrenamiento en el Estadio Monumental, en la Copa América, te miraba embobado, mi viejo me cargaba en la vuelta a casa, estas contento? Sei perche mi batte il corazón ho visto Maradona inamoratto son.
Y el domingo me diste TU camiseta, una semana entera dormí con tu remera, así como estaba, aun con las manchas del verde césped de los revolcones que habías dado de tanta patada peruana. Y todavía lloro.
Se fue mi ídolo, el más D10S de todos los humanos y el más humano de todos los Dioses. y no hay como parar este llanto.
Tenía una remera para darte, para agradecerte el gesto en la muerte de mi papá, ojalá algún día se la pueda dar a Dalma o a Gianina, ahora espero que ustedes se den el abrazo que se deben con mi viejo y se dejen de hinchar las pelotas, ya es tiempo de ese abrazo eterno.
Mi hija me mira, me vuelve a preguntar si estoy bien. Si Cata ya estoy bien HO VISTO MARADONA.
Solo muere quien es olvidado y a DIEGO ARMANDO MARADONA nunca lo voy a olvidar.